– Por la falta de descendencia, el celibato era considerado una maldición en el AT:
Gen 29,32 : “Porque” – dijo – “el Señor ha mirado mi aflicción; ahora mi esposo me amará.”
Gen 30,1 : “Dame hijos” – le dijo a su marido – “de lo contrario, me muero”.
1Sm 1-2 : Si no te olvidas de tu sierva y le das un hijo varón, yo lo consagraré al Señor.
Is 4,1 : En aquel tiempo, siete mujeres disputarán entre sí un hombre.
Lc 1,25 : Esta es la gracia que me ha mostrado el Señor, cuando me miró para quitar mi afrenta de entre los hombres.
– Puede ser señal de castigo divino:
Jr 16,1-4 : No tomarás mujer, ni tendrás hijo ni hija en este lugar.
– Algunos pasajes, sin embargo, se oponen a la exclusión del eunuco o célibe del pueblo de Dios:
Sab 3,13-14 : Bienaventurada la mujer estéril, pero limpia de toda mancha, la que no ha manchado su lecho nupcial.
Is 56,3-4 : No diga el eunuco: “¡Oh! Solo soy un tronco seco.
– En el NT se considera carisma:
Mt 19,10-12 : Y hay eunucos que se han hecho eunucos por causa del Reino de los Cielos.
1Cor 7,7-38 : Quisiera que todos fueran como yo; pero cada uno tiene un don particular de Dios.
– Por seguimiento exclusivo y por amor a Cristo:
Apocalipsis 14:4: Estos son los que no se contaminaron con mujeres, por cuanto son vírgenes.
– No desprecio por el matrimonio:
1Tm 4,3 : Prohíben el matrimonio, así como el uso de los alimentos que Dios creó.
– Ver CARISMA, MATRIMONIO, SEGUIMIENTO, VIRGINIDAD.
