– Prudencia humana:
Is 5,21 : ¡Ay de los sabios en su propia opinión, y prudentes en su juicio!
Mt 11,25 : Te bendigo, Padre, Señor del cielo y de la tierra, porque has escondido estas cosas de los sabios y entendidos.
Lc 16,8 : Y el dueño admiraba la astucia del mayordomo, porque los hijos de este mundo son más prudentes.
Rom 12,16 : No os dejéis llevar por el deseo de grandeza; ser aficionado a las cosas modestas.
1Cor 3,18s : Si alguno de vosotros se cree sabio a la manera de este mundo, sea necio para hacerse sabio.
– Prudencia cristiana:
Pr 8:14 : Míos son el consejo y el éxito, mía es la inteligencia, mía es la fuerza.
Pr 9,6 : Deja la necedad y vivirás; camina derecho por el camino de la inteligencia!
Mt 10,16 : Os envío como ovejas en medio de lobos. Sed, pues, astutos como serpientes.
Rom 8,5-8 : Los que viven según la carne aman lo carnal.
1Pt 4,7 : Sed, pues, prudentes y vigilantes en la oración.
Stg 1,5 : Si alguno de vosotros necesita sabiduría, pídala a Dios, que da a todos abundantemente, con sencillez.
