– Brote, capullo. Esta palabra es utilizada simbólicamente por los profetas para designar que el Mesías sería descendiente del rey David:
Is 11,1 : Del tronco de Isaí saldrá un retoño, y de sus raíces brotará un retoño.
Is 9,1-6 : El pueblo que andaba en tinieblas ha visto una gran luz.
Jeremías 23 : 5 : Días vendrán -declara el Señor- en que haré brotar de David un renuevo justo.
Jeremías 33:15 : Y en aquellos días y en aquellos tiempos haré que nazca de David un retoño justo.
Zac 3,8 : Porque son gente de augurio: pues he aquí, traeré a mi siervo Renuevo.
Zac 6,12 : He aquí el hombre, cuyo nombre es Renuevo; algo germinará de tu linaje.
– En el NT se cumplen estas profecías:
Mt 9,27 : Cuando Jesús se iba de allí, dos ciegos lo siguieron, gritando: “¡Hijo de David, ten piedad de nosotros!”.
Mt 21,9 : ¡Hosanna al hijo de David! ¡Bendito el que viene en el nombre del Señor!
Lc 1,32 : Será grande y será llamado Hijo del Altísimo, y el Señor Dios le dará el trono de David su padre.
Lc 2,4 : Subió también José de Galilea, de la ciudad de Nazaret, a Judea, a la Ciudad de David.
Lc 6,3 : Jesús respondió: “¿No habéis leído lo que hizo David cuando tuvo hambre?”
Jn 7,42 : ¿No dice la Escritura: El Cristo vendrá de la familia de David?
Hechos 2:25 : Siempre veía al Señor cerca de mí, porque está a mi diestra, para que no sea conmovido.
Hechos 15:16 : Después de esto volveré, y reedificaré el tabernáculo de David que se cayó. Y reconstruiré sus ruinas.
Romanos 1 :3 : De su Hijo Jesucristo nuestro Señor, descendiente de David.
Apoc 5,5 : El León de la tribu de Judá, descendiente de David, que venció para abrir el libro y sus siete sellos.
Ap 22:16 : Yo soy la raíz y descendencia de David, la estrella resplandeciente y matutina.